Felices de poder comunicarles esta buena noticia. Ayer lunes 3 de diciembre se anunciaron algunos cambios de nuestros sacerdotes, quienes a partir de marzo del 2019, asumirán una nueva labor de evangelización en distintas comunidades y obras. A continuación compartimos con ustedes de forma íntegra la carta con el que P. Felipe Valenzuela fdp, comunica y explica estos cambios.
A NUESTROS AMIGOS Y COLABORADORES Santiago, 3 de diciembre del 2018.
Nuestra identidad religiosa está profundamente marcada por el espíritu de servicio, característica fundamental de nuestra vocación. Este espíritu de servicio nos lleva a estar disponibles donde la Congregación nos necesite, por lo que cada cierto tiempo los religiosos vamos rotando en las diversas obras que tenemos en el país, lo que sin duda ha marcado nuestro sello de servicio y gestión, ya que nos permite entender y administrar cabalmente todos los proyectos, pero principalmente aprender y compartir las mejores prácticas que hemos descubierto o generado en cada obra.
Estos cambios nos permiten además conocer a todos nuestros colaboradores, descubrir sus habilidades, conocimientos y aptitudes específicas, convirtiéndose en una gran oportunidad para potenciar todos aquellos talentos que son fundamentales para la continuidad de nuestro servicio. Tenemos la convicción de que la llegada de un nuevo religioso a la obra, es una gran noticia y oportunidad para toda la familia y el proyecto que lo recibe, ya que permite comenzar misiones nuevas con renovada energía y nuevo ímpetu, refrescando el corazón y la voluntad. Esto es una virtud de la vida religiosa que seguiremos cultivando y que sin duda nos impone mayores desafíos.
Por eso los cambios en los religiosos no sólo responden a fines de administración, sino que principalmente encarnan nuestro espíritu de servicio y entrega a nuestra Misión. Por ello, y luego de un prudente tiempo en los actuales cargos de varios religiosos, quiero compartirles que para el año 2019 la Congregación ha decidido los siguientes encargos:
P. Claudio Chávez, se le ha pedido que vaya a Rancagua y se haga cargo del Pequeño Cottolengo. Él sigue a cargo de la “Fundación Cottolengo”.
P. Álvaro Olivares, se le ha pedido que vaya a Santiago y asuma como encargado del Colegio Don Orione de Cerrillos.
P. Claudio Quintanilla asumirá como párroco en nuestra parroquia de Cerrillos.
P. Felipe Valenzuela, Provincial de la Congregación, asumirá de Representante Legal en el Cottolengo de Cerrillos.
Entendiendo que la figura de Director Ejecutivo queda tal cual. Esperamos que el Espíritu Santo acompañe a cada uno de los religiosos en estos nuevos roles, así como el compromiso y voluntad de todos nuestros colaboradores para seguir consolidando nuestra Misión de servicio que concretamos a través de los Cottolengos, colegios, parroquias, centros sociales y hogares de ancianos.
También creemos que ha llegado el momento da dar un paso más: unir adecuadamente los tres Cottolengos que trabajan con la discapacidad. La actual realidad nos llama a plantearnos este desafío, que creo se nos abre como una gran “oportunidad”: La implementación de un enfoque de gestión unificado para obras semejantes, donde no solo podamos responder a las nuevas y exigentes demandas, sino que además lograr una sustentabilidad financiera que le dé solidez y continuidad a nuestros proyectos, sin tener la desgastante batalla de los subsidios. Hoy, debemos caminar decididamente a estándares que integren políticas, procedimientos técnicos y desarrollo de competencias para el mejor beneficio de nuestros residentes. Ha llegado el momento de desarrollar un plan estratégico que nos haga dar este salto tan necesario. Estoy seguro que Dios bendecirá este proyecto y sus frutos serán de gran bien para nuestra sociedad chilena.
Pedimos a Dios su gracia para que bendiga las decisiones tomadas, pero sobre todo a cada religioso, que con gran generosidad y espíritu de fe asume los nuevos encargos, confiando en que se podrá hacer muchísimo bien y glorificar al Señor de la vida, a quien buscamos servir con nuestra vocación.
¡Ave María y Adelante!
P. Felipe Valenzuela Ramos fdp. Superior Viceprovincial.